"Once hijos" de Franz Kafka, como otras obras del
autor, refleja la conflictiva relación que mantuvo a lo largo de su vida con su
padre. Los sentimientos que surgen de esa relación toman forma en esta versión
eminentemente plástica. Me atrevo a decir que cada imagen es como un cuadro que
el mismo Kafka habría pintado en tonos grises o sepia, con su impronta plena de
sobriedad, con su particular pincelada. El vesturario elegido es fundamental en
este sentido.
Pero aquí, el que se manifiesta es el padre, un canchero,
sobrador, muy aporteñado, que no puede evitar ser autoritario, crítico,
indolente; que a medida que avanza en la áspera descripción que hace de sus
hijos, se va enfrentando con el abismo que lo alejará definitivamente de cada
uno de ellos.
Los hijos son como marionetas que se mueven a su ritmo, son
su reflejo, que por momentos acerca y en otros repele.
Su exigencia, su pretensión de perfección, su egocentrismo
crónico, lo dejará completamente sólo.
Una performance con un minucioso trabajo corporal de los
actores, acompañado de música y efectos lumínicos que marcan adecuadamente cada
movimiento y/o cada sentimiento.
Una excelente propuesta, con la dirección de Federico Ponce,
que revela una búsqueda teatral diferente para disfrutar en el Espacio Kafka.
Sandra Paul
DOMINGOS 21:00
Elkafka Espacio Teatral - Lambaré 866 - CABA
Elkafka Espacio Teatral - Lambaré 866 - CABA
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